Si Dios fuera negro -mi compay- todo cambiaría
Fuera nuestra raza -mi compay- la que mandaría
Negro el presidente
Y el gobernador
Negro el abogado
Y negro el doctor compay
Si Dios fuera negro -mi compay- todo cambiaría
Fuera nuestra raza -mi compay- la que mandaría
Negra la azucena
Y negra la tiza
Negra Blanca Nieves
Negra Mona Lisa.
Si Dios fuera negro -mi compay- todo cambiaría
Fuera nuestra raza -mi compay- la que mandaría
Negro fuera el día
Negro fuera el sol
Negra la mañana
Negro el algodón
Si Dios fuera negro -mi compay- todo cambiaría
Fuera nuestra raza -mi compay- la que mandaría
Negro fuera el Papa
Y negro el ministro
Los angeles negros
Negro Jesus Cristo -compay-
Canción de Roberto Angleró cantada por Rubén Blades
*************************************
Esta mañana me levanté tarareando la canción de Rubén Blades.
Es una de mis favoritas porque expresa con humor absurdo la
carga racista en las que nuestras sociedades se han dsarrollado.
Me acordé también de Watson, el padre del DNA y de sus recientes
declaraciones sobre la inteligencia de los negros. Leí que Watson se había excusado finalmente, después de que el mundo le cayera literalmente encima.
Recordé igualmente la controversia creada por el libro The Bell Curve, al principio de los 90, según el cual se tendrían estadísticas que demostrarían la inferioridad de la inteligencia de la raza negra.
Las críticas llueven y todos protestan porque nadie quiere creer en teorías de superioridad racistas. Sin embargo nadie tampoco va al meollo del asunto, que, en mi opinón, es cómo se mide la inteligencia esa que se dice que unos tienen más que otros. ¿Cómo es posible medir la capacidad de comprensión de conceptos, basándose, justamente, en conceptos muy particulares que aquellos que definen los tests definen como inteligencia? Es la clásia historia del huevo y la gallina o de aquellos que se pagan y se dan el vuelto.
Ése, es el primer problema que yo le veo a todos esos estudios. Pero la cosa va más allá ya que, aunque se suponga que si, que esos tests son apropiados, hay entonces que cuestionar las conclusiones generales. Por ejemplo, si mi memoria no me falla, los resultados de The Bell Curve estaban basados en test de IQ realizados
únicamente a la población de los Estados Unidos.Recuerdo que cuando el libro apareció, yo me quedé asombrada de que se llegara a una conclusión tan general sobre razas, con un test que es administrado a una población específica, con problemas, ventajas y desventajas sociales determinantes. ¿Cómo decir que los resultados obtenidos en ghettos pobres o ricos norteamericanos serían significativos para medir la inteligencia de razas enteras viviendo en continentes y condiciones distintas?
Afortunadamente, la controversia sobre la famosa Bell Curve, se calló por si misma. Pero las declaraciones de Watson llevan una carga más, debido a que se trata de uno de los científicos que más ha influenciado la Ciencia moderna. El argumento de Watson es aparentemente científico ya que está basado en la noción estocástica de la vida, que nuestra sociedades aceptan como un hecho: Watson dice que no hay razón para que la inteligencia humana se haya desarrollado igualmente en distintas partes del globo. Agrega luego que cualquiera que tenga empleados negros puede darse cuenta de ello.
La estocasticidad del argumento está en que la evolución no es determinista,y que, por lo tanto, es el juego de probabilidades lo que pudo haber determinado que poblaciones que evolucionaron de manera distante pudiesen desarrollar diferentes niveles de intelecto. No soy el padre de la genética, pero mis escasos conocimientos me dicen que, sorprendentemente, los humanos somos muy parecidos genéticamente, las diferencias genéticas son, en el fondo, muy pocas dentro de la especie humana. Es decir, que a pesar de la estocasticidad de nuestra evolución, si es factible que el desarrollo genético del intelecto haya seguido el mismo camino que el desarrollo de todos los otros genes que gobiernan la especie humana y que nos hacen muy parecidos los unos a los otros.
En cuanto a la segunda frase de Watson, yo no tengo empleados, pero
gracias a mi trabajo y a que vivo en una ciudad cosmopolita, he tenido la posibilidad, a lo largo de los años, de evaluar a centenares de estudiantes de muchas razas y culturas. Mi conclusión es que la formación previa, el ambiente y la personalidad son los que determinan el éxito de cada quién. La formación previa, porque le da las bases para entender conceptos más profundos, el ambiente que favorezca trabajar duro y la personalidad que lleve al individuo a querer aprender y no rendirse ante las dificultades.
Nada que ver con la raza, mi querido Watson.
En conclusión, pienso que las palabras de Watson son terriblemente miopes y delatan una visión estrecha de un viejo y rígido mundo anglosajón ajustado a sus propias experiencias.
En eso, los Venezolanos tenemos una gran ventaja, porque nuestra experiencia y nuestras viviencias son multicolores.
Entonces me digo que a falta de vivir en Venezuela, los grandes científicos de este mundo deberían todos oir Salsa al menos una vez en la vida.
Por cierto, ¿Alguien tiene la dirección de Watson para mandarle el CD de Rubén Blades?
No comments:
Post a Comment