El año que conocí a mi amigo A., él me explicó que el primero de Marzo se acababa el invierno. Yo me reí de él ya que a menudo teníamos diez centímetros de nieve en la entrada del edificio y muchas veces las más grandes nevadas caían en Marzo. Además, ¿No y que la primavera comenzaba formalmente el 21 de Marzo?
A. me dijo que yo no entendía, que a pesar de que cayera toda la nieve del mundo hasta el mes de Mayo, a partir del primero de Marzo se acababan los grandes fríos, lo cual, para él, significaba que el invierno ya había transcurrido.
Al año siguiente, A. me volvió a decir lo mismo el primero de Marzo, y el año siguiente, y el siguiente. Comenzamos entonces a llamarnos los primeros de Marzo, a veces en el medio de una tempestad insólita, para felicitarnos, entre carcajadas, por el fin del invierno. El primero de Marzo se convirtió entonces en nuestra fecha de reencuentro. En cualquier parte del planeta donde nos encontráramos, siempre ha habido un saludo de felicitaciones en ese preciso primero de Marzo.
Han pasado muchos años y aún seguimos nuestra tradición. En algunos primeros de Marzo nos hemos anunciado acontecimientos felices y, en otros, momentos duros y difíciles, pero sin excepción, por carta, teléfono o correo electrónico, desde China, Roma, Paris o Portugal, el Primero de Marzo marca la renovación de una vieja amistad y el reinicio de nuestra primavera particular.
Con los años, nos hemos vuelto competitivos y jugamos indirectamente a quién se va acordar primero de decirle al otro que ya estamos en el primero de Marzo. Cuando trabajaba con el mail de mi sistema Unix me creaba unos comandos especiales para envíar el correo exactamente a las doce de la noche, cada primero de Marzo. Sin embargo, desde que cambié de sistema de correo no me he preocupado en descubrir cómo temporizar los envíos y a veces ha sido él quien ha tomado la delantera.
Este año pasé la última semana de febrero pendiente. Puse incluso una entrada en mi agenda para recordarme del envío.
Pero no valió de nada, perdí de todas maneras.
Esta mañana al abrir mi correo, tenía un mensaje de A. cuyo subject decía:
"Terminó el invierno! No te olvides que hoy es primero de Marzo!"
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