Me impresionó la celeridad y la seguridad de la que dió muestras la Fiscal General esta semana cuando decidió que había que imputar a tres ingenieros de Edelca tras una falla mayor del sistema eléctrico.
Me impresionó además la manera clara y concisa con la que dijo que todo esto tiene que ver con el delito de sabotaje o daño culposo de la Ley Contra Delitos informáticos. Me llamó la atención la conexión rápida que hizo entre una falla electrica y una ley sobre informática que seguramente el legislador promulgó pensando penalizar a hackers.
Pero después de leer la ley, me doy cuenta que el contorsionismo interpretativo de la Fiscalía no es de extrañarse dado que cualquier sistema tiene hoy en día capacidad informática. Entonces el potencial acusatorio de la ley contra cualquiera que trabaje en aspectos medianamente técnicos es inmenso, lo cual asegura que dicha ley será una nueva mina de oro en el Klondike persecutorio de la Fiscalía.
Finalmente, me pareció peculiar cómo la Fiscal interpretaba tán rápidamente los hechos como “delito culposo” definido en los artículos que aquí les copio de la Ley contra delitos informáticos.
Artículo 7º
Sabotaje o daño a sistemas. El que destruya, dañe, modifique o realice cualquier acto que altere el funcionamiento o inutilice un sistema que utilice tecnologías de información o cualquiera de los componentes que lo conforman, será penado con prisión de cuatro a ocho años y multa de cuatrocientas a ochocientas unidades tributarias. Incurrirá en la misma pena quien destruya, dañe, modifique o inutilice la data o la información contenida en cualquier sistema que utilice tecnologías de información o en cualquiera de sus componentes. La pena será de cinco a diez años de prisión y multa de quinientas a mil unidades tributarias, si los efectos indicados en el presente artículo se realizaren mediante la creación, introducción o transmisión, por cualquier medio, de un virus o programa análogo.
Artículo 8º
Sabotaje o daño culposos. Si el delito previsto en el artículo anterior se cometiere por imprudencia, negligencia, impericia o inobservancia de las normas establecidas, se aplicará la pena correspondiente según el caso, con una reducción entre la mitad y dos tercios.
Al crear la ley, el Legislador probablemente se refería a delitos cometidos por hackers. Sin embargo, la Fiscal rápidamente escogió entenderlos como si incluyeran cualquier acto informático sobre cualquier sistema. Al hacer eso, la Dra Ortega está cayendo en una interpretación que no sólo es absurda, sino que es sumamente peligrosa para los venezolanos. De hecho, cualquier persona que trabaje en cualquier sistema que tenga que ver con informática alguna vez se equivocará y “alterará el funcionamiento” del sistema, tal como dice la ley. La interpretación de Luisa Ortega permite entonces a la Fiscalía criminalizar cualquier error que altere el funcionamiento de cualquier sistema!
¿Cuántas veces ha tenido la Dra Ortega un crash en su computadora, o en la red interna de su casa o de la Fiscalía? Si interpretamos la ley así como lo hizo en el caso de los ingenieros de Edelca, casi todos aquellos que administren sistemas relacionados con la informática habrán, varias veces en su vida, ocasionado algún “daño culposo”. Según eso, una gran parte de los técnicos venezolanos tendrían, en un momento u otro, que ir presos.
Le van a faltar cárceles, Dra. Ortega.
Pero la interpretación de la Fiscal, además, es audaz, ya que para sugerir delito culposo según la Ley de delitos informáticos en el caso de los apagones, tiene que inferir que el incidente se dio, tal como dice el artículo 8, por la “imprudencia, negligencia o impericia” de los ingenieros .
La audacia de la Dra. Ortega está en que se atreve a inferir algo que ingenieros con experiencia no inferirían sin un pánel extenso de experticia. ¿Puede realmente la Dra. Ortega demostrar que lo que sucedió fue por negligencia y que no es un fenómeno intrínseco de las condiciones de la red?¿Sabe la Dra de estabilidad de sistemas, de protecciones y de fenómenos transitorios?
En cualquier caso, lo que si sabemos todos es que el domingo 19 de octubre tres ingenieros se fueron a trabajar... y terminaron presos.
De ahora en adelante, gracias a la intervención rápida de la Fiscal General y a su interpretación amplia de “delito culposo”, cualquier ingeniero y cualquier operador de cualquier sistema informático, sobre todo los que trabajan para el gobierno, que pronto, dada la ola de nacionalizaciones, serán la gran mayoría de los ingenieros venezolanos, sentirán que tienen una espada de Damocles cada vez que vayan a trabajar.
Y yo me pregunto, Dra Ortega ¿Cómo se llama el delito según el cual se le altera, daña y modifica la vida a miles de profesionales técnicos para poder encubrir que el gobierno no está haciendo su trabajo?
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